Dios escucha tu oración!
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Por: Hermana Waly
Dios siempre está presto para escuchar tu oración, sin importar el momento o el lugar. La conexión que establecemos a través de la oración es un vínculo sagrado que nos permite expresar nuestras preocupaciones, agradecimientos y deseos más profundos.
Jesús nos enseñó a orar a través del Padre Nuestro.
En Mateo 6: 9 - 13 podemos leer como la oración al Padre comienza, se desarrolla y va terminando en un orden. Sí, analizamos esa oración en la versión (traducción al lenguaje actual) de la Biblia, observamos, adoración, reconocimiento al único y verdadero Dios, sometimiento, obediencia, humildad, solicitud de los alimentos, arrepentimiento, perdón, y solicitud de protección.
Pasaje Bíblico
https://www.biblegateway.com/passage/?search=Mateo%206&version=NTV
“Padre nuestro
que estás en el cielo:
Que todos reconozcan
que tú eres el verdadero Dios.
10 Ven y sé nuestro único rey.
Que todos los que viven
en la tierra te obedezcan,
como te obedecen
los que están en el cielo.
11 Danos la comida que necesitamos hoy.
12 Perdona el mal que hacemos,
así como nosotros perdonamos
a los que nos hacen mal.
13 Y cuando vengan las pruebas,
no permitas que ellas nos aparten de ti,
y líbranos del poder del diablo.”
La Importancia de la Oración
- Comunicación Personal: La oración es una forma de comunicación directa con Dios, donde podemos compartir nuestros pensamientos y sentimientos de manera sincera.
- Refugio en Momentos Difíciles: En tiempos de dificultad, la oración puede ser un refugio que proporciona consuelo y paz interior.
- Gratitud y Agradecimiento: Expresar nuestra gratitud a través de la oración nos ayuda a reconocer las bendiciones en nuestras vidas y a cultivar una actitud de agradecimiento.
- Guía Espiritual: A través de la oración, buscamos dirección y sabiduría para tomar decisiones alineadas con nuestros valores y propósitos.
- Fortalecimiento de la Fe: Al orar, fortalecemos nuestra fe y confianza en Dios, sabiendo que siempre está dispuesto a escucharnos.
Cómo Hacer de la Oración un Hábito
- Establecer un Tiempo Diario: Dedica un momento específico cada día para la oración, creando un hábito que se convierta en parte de tu rutina diaria.
- Crear un Espacio Tranquilo: Encuentra un lugar tranquilo donde puedas concentrarte y sentirte en paz mientras oras.
- Reflexionar y Analizar: Tómate un tiempo para reflexionar sobre tus oraciones, permitiendo que tu mente y corazón se alineen con tus palabras.
- Abre tu corazón y dile al Señor todo, no te quedes con nada, porque Dios puede ver dentro de ti todo lo que sientes.
- Dios conoce todas tus necesidades, está bien que le hables al respecto, pero enfócate mejor en orar por otras personas, ya que cuando oras por los demás, Dios se encarga de tus peticiones también.
- Orar en las mañanas es maravilloso, ya que puedes conectar con el Señor al comienzo del día, también durante el día puedes mantenerte conectado con Dios y en las noches antes de acostarte nuevamente ora.
- Práctica el hábito de orar constantemente y verás como vas fluyendo y como tus pensamientos se van alineando con las palabras.
- El Espíritu Santo nos ayuda y es quien nos va guiando y dando palabras para cada oración.
Dios siempre está listo para escucharnos, y a través de la oración, encontramos una senda hacia la paz interior, esa paz que sobrepasa todo entendimiento, la comprensión y la conexión espiritual con nuestro Padre, quien habita en todas partes, porque es Omnipresente, Omnisciente, y Omnipotente.